domingo, 3 de mayo de 2015

NOTA

Movimiento por los 43 penetra en la
 Fiscalía del Estado para exigir justicia 

Chilpancingo, Gro.- Padres de familia de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos el 26 de septiembre en Iguala, estudiantes de la misma normal e integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) unidos, marcharon en Chilpancingo e irrumpieron en las oficinas centrales de la Fiscalía General del Estado donde hicieron pintas, quebraron algunos cristales y realizaron un mitin.  

La movilización inició después de las 11:00 de la mañana en el monumento a Nicolás Bravo al norte de la ciudad. Se unieron unas mil 500 personas encabezadas por los padres de los jóvenes desaparecidos, pero entre los asistentes estaban grupos representativos de la CETEG, provenientes de las siete regiones del Estado.
Estaban los grupos de la Montaña y Costa Chica encabezados por Ramos Reyes Guerrero y los de Costa Grande, Acapulco, Zona Centro, Norte y Tierra Caliente que lidera la maestra Antonia Morales. Por primera vez los líderes de la CETEG dejaron de lado sus conflictos internos y unieron a sus bases en pro de la movilización en apoyo a los padres de familia de los 43 normalistas de Ayotzinapa, a quienes exigieron al gobierno presentar con vida.
La marcha avanzó hacia el sur sobre la avenida Insurgentes y siguió sobre Ignacio Ramírez cruzando por el zócalo hasta el monumento a las Banderas. De ahí continuaron sobre Lázaro Cárdenas hasta llegar a Ciudad Universitaria, a escasos 200 metros de distancia del Congreso del Estado.
En C.U., los marchistas hicieron un alto para retirar propaganda política de candidatos a presidentes municipales y diputados, entre éstos de Marco Antonio Leyva Mena del PRI y Yamilet Payán del Partido de los Pobres.
Mientras esto pasaba, el personal del Congreso del Estado estaba siendo desalojado ante el temor de que llegaran hasta ahí los manifestantes. Por su parte, los policías estatales que permanecen de guardia en esa sede, se alistaban con traje antimotín.
Pero los manifestantes ignoraron este edificio y siguieron sobre Lázaro Cárdenas hasta el cruce con la avenida Ruffo Figueroa donde la parte cetegista de Ramos Reyes mantiene su plantón. Doblaron a la derecha y se incorporaron a la lateral del boulevard Vicente Guerrero con la misma dirección hacia el sur.  Siguieron por esa vía hasta llegar a la altura de la Fiscalía General del Estado (FGE) donde de manera sorpresiva ingresaron. Los elementos ministeriales que se encontraban en las plumas de seguridad no pusieron resistencia al ver que venía un grande contingente.
Sin embargo, desde algunas oficinas otros elementos video-gravaban a los protestantes, por lo que la avanzada de la marcha integrada por normalistas y maestros encapuchados, apedreó a los trabajadores que pretendían grabar su acción de protesta.
Cuando empezaron a lanzar piedras, los trabajadores de la Fiscalía decidieron retirarse, pero en dicho ataque, los manifestantes quebraron los cristales de algunas ventanas.
De ahí en adelante, los normalistas solo realizaron pintas y destrozaron dos máquinas expendedoras de productos chatarra. Dejaron las paredes y muros repletos de pintas con la leyenda: “nos faltan 43”, y: “no a las elecciones”.
Mientras los protestantes irrumpían en la parte norte de la Fiscalía, los trabajadores eran desalojados apresuradamente del lado sur que da salida al boulevard René Juárez Cisneros, sobre el encauzamiento del río Huacapa.
Pero los manifestantes no generaron más violencia. Ya dentro del inmueble, a la altura del Instituto de Capacitación y el Auditorio, se concentraron todos para iniciar un mitin en el que representantes de diversas organizaciones sociales exigieron la presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos, y advirtieron una vez más que no permitirán el desarrollo de las elecciones el próximo siete de junio.            


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